La diputada bonaerense del Frente
para la Victoria, Lucía Portos, repudió durante la sesión de este miércoles en
la Legislatura provincial el accionar del presidente del Concejo Deliberante de
Malvinas Argentinas, Alberto Cobreros, al que calificó como "una práctica
política que impide el ejercicio cabal irrestricto de nuestra democracia".
Antes del encendido alegato de Portos, los concejales
del FPV de Malvinas Rodolfo Tailhade y Mariano Hidalgo estuvieron reunidos con
el presidente del bloque de diputados Fernando "Chino" Navarro, y los
legisladores Guido Lorenzino y Viviana Nocito. "Escucharon asombrados
el sinfín de abusos, arbitrariedades e ilegalidades que ocurren diariamente en
el Concejo Deliberante de Malvinas Argentinas. Les informamos acerca de la
denuncia penal que formulamos contra Alberto Cobreros, y fuimos enfáticos en la
defensa de los compañeros asesores que sufrieron el despido", explicó
luego Tailhade y adelantó que llevarán el caso a la Comisión de Asuntos
Municipales que preside Nocito.
Las palabras de la Diputada
de la provincia de Buenos Aires, Lucía Portos:
Durante la sesión en la legislatura provincial, Lucía
Portos, manifestó que “en Malvinas Argentinas permanentemente se apremia, se
patotea, se impide la discusión política, se violentan las sesiones en los
cuales se tienen que discutir los asuntos municipales”. Y enumeró cada una de
las situaciones que sufren los ediles del FPV distrital: “Se llaman a
calendario, se caen o de repente desaparecen del orden del día los proyectos de
los compañeros del FPV, aún a pesar que el intendente tiene una enorme mayoría
de 15 concejales contra 9, sistemáticas interrupciones al hablar, negándoles el
uso de la palabra, se les niega el acceso a la información, no existen las
versiones taquigráficas, no se votan las cosas en forma correspondiente. En la
última sesión, donde se tuvo que hacer la votación sobre la rendición de cuentas
que se hace anualmente, no se votó en los hechos, hay un video que lo
comprueba, y luego, figuró como aprobada por la mayoría del cuerpo Deliberante”.
Portos consideró que el proyecto de repudio debe
ser “un asunto de la Constitución Argentina, el derecho a la libre expresión,
el derecho a la participación política, y el respeto a las minorías políticas que
está garantizado por los artículos 36 y 37 de nuestra Constitución Nacional”. Por
eso pidió por “un repudio unánime a la práctica política que impide el
ejercicio cabal irrestricto de nuestra democracia en un lugar tan importante
como es el Concejo Deliberante en la vida democrática de un distrito”.
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